El Director Ejecutivo del Servicio Nacional de Áreas Protegidas (SERNAP), Adrián Nogales Morales, recomendó no construir la Carretera Villa Tunari- San Ignacio de Moxos que atraviesa el Parque Isiboro Sécure, rico en biodiversidad.

”Para nosotros como sistema no creo que sea ´permisible´ porque tiene una biodiversidad bastante rica que tiene el área. Nosotros no decidimos porque son los actores sociales quienes deciden nosotros sólo damos asistencia técnica”, manifestó Nogales Morales, quien es un indígena Yuracaré, proveniente, justamente del Parque Nacional Isiboro Secure.

Para los pueblos indígenas que habitan en el Parque Isiboro Sécure no es de importancia la edificación de la nueva carretera Villa Tunari- San Ignacio de Moxos, manifestó Nogales, a tiempo de indicar que al final son las etnias que habitan en el lugar los que deben decidir sobre este tema.

“Si analizamos bien yo creo que para los pueblos indígenas no es de necesidad la nueva vía proyectada“, argumentó.

Nogales explicó que su despacho es la encargada de otorgar el reporte técnico sobre todo tipo de obras que se puedan realizar dentro de áreas protegidas, los cuales son de patrimonio natural y cultural del país.

El sábado 31 de julio, el Presidente Evo Morales, instruyó a los parlamentarios del oficialismo del Departamento del Beni coadyuvar con el Ejecutivo en las consultas que se realicen a los indígenas del Parque Isiboro Sécure para viabilizar la construcción de la Carretera Villa Tunari (Cochabamba), San Ignacio de Moxos (Beni).

“Creo que es importante seguir conservando (el Parque Isiboro Sécure) porque si seguimos conservando nuestras áreas protegidas, estamos conservando el tema del medio ambiente estamos defendiendo o contrarestando el tema de los cambios climáticos que sufre el planeta tierra”, remarcó.

En ese entonces, Evo Morales acusó a las Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) de impedir la construcción de esta carretera y aclaró que es obligación del gobierno el preservar el medio ambiente.

El funcionario recordó que los indígenas del lugar no están de acuerdo con la carretera mencionada porque consideran que el lugar es “tierra santa o loma santa”.

“Nosotros como SERNAP (…) en su conjunto siempre estamos para resguardar todo lo que son los recursos naturales Y la biodiversidad que tienen estas áreas protegidas”, finalizó.

La obra mencionada comprende tres tramos pero en el segundo los indígenas de las etnias Yuracarés, Moxeños y Chimanes se oponen a la construcción de la carretera porque atraviesa por un área protegida, lo que ocasionará un daño ambiental irreversible y que pondrá en peligro la Tierra Comunitaria de Origen (TCO).

Hasta el momento el gobierno no cuenta con las licencias ambientales para iniciar la obra, pese a que en la gestión 2008 suscribió el contrato llave en mano con la empresa OAS por un monto de 415 millones de dólares de los cuales 332 millones de dólares corresponde a un crédito del gobierno del Brasil.
Fuente: ANF